Visitas de la última semana a la página
viernes, 22 de julio de 2022
El Tobiano Azulejo
miércoles, 9 de febrero de 2022
"Guanaco" - Saúl Huenchul
martes, 1 de junio de 2021
"Por Chambón"
El día recién pintaba con una brisa muy fria
y sobre el campo se veía que la heladita blanqueaba
en el palenque roncaba escarbando como loco
y Alazán medio tioco que a punto empecé a manear;
pa´poderlo ensillar y doblegarlo de a poco.
Como era disparador y amante a la corcobeada
con una soga sobada le acomodé el bajeador
pa´mi fue ese el error porque al montarlo estaqueado
de la oreja y malcornao no quería que corcoveara
y menos que disparara porque ya era sancochao
Repito estaba estaqueado cuando al recao le caí,
desde ahi de punta lo ví solo en dos patas parao,
y al chocar un alambrao justito en un remolino
en un ¡Jesus! se me vino y se bien que por pavote,
esa vez hasta el cogote allí me apretó el ladino.
Alcancé a ladear la cara, pero me pegó en el hombro
con el morro y hecho escombro, deseé que no me quebrara
y entre lucecitas raras, que se ven en tales casos
se enderezó alunadazo corcoveó con el recao
y yo también arrollao me enderecé y dí unos pasos.
Después di vuelta apurao, y caí como una roca
mientras sentía una boca como un gusto ensangrentao
pensé -"Estaria deslomado" ya no me podía parar
pero mi hermano sin par aunque chiquito en la vida
trajo agua de una bebida y a balde me empezó a echar.
Sentí un alivio grandioso y como leona mañera
me arrrastré hasta la catrera para quedar silencioso
moverme era dolororoso pero era nomas el destino
y mi hermano campesino se fue a pie y sin descanso;
a buscar caballos mansos y a llegarse hasta un vecino.
Después anduve entre dotores como un mes bien medicado
con pastillas y bien fajado para sanar de mis dolores
pero en los ratos mejores sentía tremendos pinchazos
en el hombro y en el brazo la cintura me dolía;
y una sombra parecía que avanzaba a medio paso.
Hasta que un buen compañero me dijo con mucha fé
-"Voy a llevarte a lo de Valdez que a mi me salvo el cuero".
hombre gaucho el curandero ni bien me vio mal parao
me dijo -"Qué le ha pasado ? lo ha pisado una tropilla,
porque a parte de la estilla está medio deslomado".
Le detallé el apretón, dejando bien plantao
que lo que me habia pasado me habia pasado por chambón,
y el hombre muy tranquilón le dijo a su esposa bella,
-"Alcanzame una botella con agua bien calentita
que éste mozo necesita que lo cuartiemos en la huella".
Me dijo que lo caliente en la botella en acciones
era pa´que los tendones aflojaran derrepente
y al frotarme suavemente con un ungüento aromao
y me decía "Lo machucado, que tiene adentro le intuyo
se lo va a sacar un yuyo que le daré preparado".
-"Tendra´que hacer ejercicio con ese brazo vendado
y no camine apurao aunque lo apure su oficio,
cúrese con sacrificio, si anda a caballo usted vea
que en el más mansito sea, ni loco en un redomón
porque en el menor tirón puede pasarla muy fea".
Y al preguntarle-"Señor ¿cuánto le debo pagar?"
me dijo sin titubear, -"Guarde eso en el tirador"
pero al insistir por favor por tal atención prestada
volvió como una alborada a decirme bien clarito,
-"Vaya tranquilo mozito que a mi no me debe nada".
Siempre le agradeceré porque ahora entre los doctores
quien me sacó los dolores fue el viejo Antonio Valdéz
después entendido él porque de cada ciencia medida
y entre tantas avenidas cualquiera podrá observar;
de que pa hacerse golpear hay siempre tiempo en la vida.
sábado, 28 de diciembre de 2019
El redomón Pangaré
sábado, 14 de septiembre de 2019
El Gaucho Bairoletto
Pelo medio rubio, los ojos celestesde pañuelo blanco y bombacha gris,venia como el viento casi del oestey alpargata y saco, era un gaucho asi.Cuentan por la pampa, que siempre a caballo,lo vieron los ranchos, llegar y partir,incluso se cuenta que anduvo en un bayo,no se cuantos años antes de morir.Cojinillo grande, maletas de lona,donde un gaucho puede llevar pa´comer,este traiba balas, junto a las caronasy un 44 que podian ver.Era Bairoleto el gaucho que digo,un mal elemento pa´la sociedad,pero entre los pobres, un señor amigoy el mas asesino pa´ la autoridad.*...De mirada fria y ojos muy hundidos,decian los partes, cumpliendo su rol,pero esto, señores, siempre ha sucedidode mirar al viento y andar bajo el sol...Quedo en la cautiva, como una neblina,una cruz de palo y un raro estupor,cuando en el asalto moria Molinapor no obedecerle a Juan salteador.Aquel Juan que andubo, pero ya cansadose cambio de nombre buscando la paz,con una familia y un triste pasado,como alguien que paga por su libertad.
*... Pero la soberbia de algunos señores,que se creen los dueños de todo a su ver,son los responsables, de muchos dolores,que un gaucho en la vida, puede cometer...No es lo mismo digo, hablar de justiciaque hablar de soberbia, o de autoridad,autoritarismo es casi injusticiay casi injusticia es ferosidad. Septiembre 14 del 41 recien por el este comienza a aclarar, los teros alertas, parecen cedrunos,puntitos de sombras que entran a gritar.*...10 armas de fuego que apuntan a un rancho,son diez policias, que esperan trunfal, que esperan repito con ojo e´carancho,a un gaucho que duerme su sueño final...Rodriguez ah dicho, che Juan anda gente,despierta el matrero, ya no puede huir,por que una tormenta de plomos calientes, le queman el cuerpo y lo ven morir.*... por la puerta el rancho, se asoman dos niñas,dos niñas que miran sin llanto, ni vozuna esposa grita, con fuerza e´campiña,manga de asesinos, vayansen por Dios !...En el patio yase y en sangre bañado,el gaucho que hace años dio muerte a Farachey alla por el este, un tanto clipsado,el sol reciensito, asomando esta...
lunes, 1 de octubre de 2018
EN UN OSCURO - SAUL HUENCHUL
martes, 8 de mayo de 2018
SIN GARANTIA - SAUL HUENCHUL
lo poco de un amasijo que aprendí de puro hambreao
Ah!!! mi padre en el pasao él y yo sin cocinera y girando en la matera
en las noches largas o cortas hacía una bolsa ‘e tortas para las semana entera.
/ Y qué tortas compañero!! tortas que cualquier sotreta
las cargaba en la maleta como igual debajo el cuero
y buscándole el aujero cuando ya se habían oreao
a los tientos del recao podía lo mismo llevarlas
pero eso sí pa’ mascarlas había que estar entrenao.
Con grasa ‘e potro o de pique que son dos grasas muy finas
después… agua, sal y harina y al amasijo sin chiste
y cuando medio te viste que la masa entra a subir
no hay mucho para decir que hacen las tortas y bien
a la olla o al sartén que es lo mismo pa’freir.
Ahora…he visto algunas chinas que hacen de tortas… deleites
con royal, huevo y aceite que acomodan en la harina
y las sacan tan divinas.. que siempre resultan pocas
pero hay algo que no embocan las hacen chicas sin cuento
lunes, 8 de enero de 2018
HISTORIA DEL GAUCHO GIL - Saul Huenchul
Saúl Huenchul |
domingo, 10 de diciembre de 2017
El pico chato
Foto Macarena Grenier |
jueves, 20 de octubre de 2016
LA HISTORIA DEL GAUCHITO GIL
Nacio en el Mil Ochocientos del año Cuarenta y Siete
sábado, 15 de octubre de 2016
MILONGA PARA MAMA
viernes, 9 de septiembre de 2016
EL LISTA TUERTA
que no era un croto chambon ni tampoco un alma muerta
desde cerquita de la puerta me soltaron al flete
se elevo en forma de cohete, y en el aire manoteando
se quedó como esperando de ver caer al jinete.
viernes, 19 de agosto de 2016
LA CRUZ DEL PUESTO
Allá donde el viento arranca
silbos de cada jarilla
y flamea la flechilla
por sobre las toscas blancas,
con su cumbrera lunanca
y el techo medio plomizo,
juntito a un chañar macizo,
entuavía con arrogancia,
se divisa a la distancia
un ranchito de chorizo.
Su aspecto de poca suerte
parece gritar erguido
entuavía no está vencido
por más que le han pegao fuerte.
Y en esas noches de muerte,
negras cuando el viento zumba
por detrás del rancho, cumba,
sale pasar una luz
que va a posarse a una cruz
solitaria de una tumba.
Cuentan que en ese lugar
una familia vivía,
y hermosa niña tenía
con tres gurise'a la par.
Cierta vez llegó a domar
un mozo de pobre facha
que al andar de buena racha,
después de jugarse el resto,
tuvo que d'irse del puesto
por querer a la muchacha.
Y habla un viejo cazador
ebrio que el tiempo gastó:
que la muchacha se ahorcó
cuando se fue el domador.
Él fue su único amor
y el último también,
porque al no mirarlo bien
los dos padres se negaron,
y aquél romance truncaron
para siempre como ven.
Decía el viejo lagrimiando,
mustio de pena y dolor,
qué el vió al mozo domador
cuando se alejó troteando.
Treinta baguales arreando,
dos cencerro' y dos carguero',
bien montao sobre un overo
de colmillo y redomón
pero con la desición
de seguir junto al pampero.
Pasaron días y meses,
ocho lunas sin alarde,
y en esa hora que la tarde
todito el campo adormece,
se oyó un lamento con crece'
que hizo tiritar los pechos
era un gurí que maltrecho
o'servaba sollozando,
a su hermanita colgando
de la cumbrera del techo.
Fue el mismo viejo del cuento
que cortó el lazo enseguida
para que el cuerpo sin vida
cayera al suelo un momento.
Llanto, dolor, sufrimiento,
de dos padre' al contemplarla
y así después de velarla
dos noches, sobre un recuadre,
quiso la madre y el padre
tras del ranchito enterrarla.
Y frente al horcón sin meya,
sobre el piso si uno busca,
se ve una mancha parduzca
que debe ser sangre de ella.
Desde entonce' y por la huella
que pasa costeando el cerro,
se oyen sones de cencerros
con tropel de redomones
que no son más que visiones
para hacer torear los perros.
Y en noches antes de llover,
cuando el relámpago empieza,
parece que entre en la pieza,
sollozar a una mujer.
Mas cuando empieza a crecer
la noche en tinieblas obvia,
de la habitación que agobia
parece salir al tranco
una figura de blanco
que se parece a una novia.
Deben ser las ilusiones
de aquella muchacha triste,
que en cada piedra persiste
en un sueño hecho visiones.
Ya todos de esas regiones
se han marchado uno a uno,
y aunque es leyenda que acuno
yo mismo he palpao la cruz
donde se posa luz
sin molestar a ninguno.